La Feria del Libro de Madrid veta a las editoriales 100% digitales

Desmintiendo las noticias publicadas estos días, en las que los medios se hacían eco de la incorporación del libro electrónico a la oferta de la Feria del Libro de Madrid tras la polémica suscitada el pasado año, los editores 100% digitales han sido vetados y no pueden exponer ni ofrecer sus libros en el recinto de la Feria.

Foto: Alejandro Slocker

Según el comunicado remitido a los medios por la editorial digital Luarna, la organización de la Feria del Libro de Madrid, la más importante de las que se celebran en España y que debería ser modelo y escaparate del libro en todos sus soportes, sigue poniendo trabas para que los eBooks comiencen a formar parte de la oferta editorial en nuestro país. Tal y como se anunció en su día, por primera vez se iban a poder ofertar en el Parque de El Retiro obras en formato digital. Sin embargo, según nos advierten desde Luarna, «esta novedad se refiere sólo a los eBooks de las editoriales tradicionales que también publiquen sus obras en papel, ya que las editoriales exclusivamente online siguen teniendo vetada la participación en esta Feria«.

Y ofrecen más detalles: «Según el Reglamento de la Feria y de cara a optar a la concesión de una caseta en calidad de editor, el artículo 6 (apartado IV) relativo a «sujetos excluidos» dice lo siguiente: «No podrán participar en la Feria los libreros, editores y distribuidores  que se dediquen únicamente a la venta, edición y distribución, respectivamente, de libros en edición digital publicados en Internet o mediante cualquier otro soporte distinto de la tradicional edición impresa en papel»«.

Antonio Quirós (Foto: Luarna)

Según declaraciones de Antonio Quirós, Consejero Delegado de Luarna, «es una pena que se hayan abandonado iniciativas tan buenas como las que se pusieron en marcha la pasada Feria, que apoyaban la realidad del mercado y miraban hacia el futuro del libro en todos sus formatos. Seguir primando el soporte en lugar del contenido en el acontecimiento más importante del sector librero, donde deberían estar presentes todos los actores del mercado, supone un gran atraso. Ignorar a las editoriales cuyo catálogo es 100% digital no cambia el hecho de que esta nueva modalidad de edición cada vez tendrá más peso en este sector».

El Grupo de Trabajo del Observatorio de la Lectura y del Libro, dependiente del Ministerio de Cultura, ofreció en fechas recientes los datos en los que se confirmaba el crecimiento en España de la edición electrónica de libros en 2009 con un 48,2%, respecto a 2008. De hecho, este tipo de edición alcanza el 11,4% de la producción editorial, lo que supone unos 12.000 títulos. «Resulta por tanto, incomprensible, que el sector le de la espalda a un mercado en claro crecimiento», concluye Quirós.

Revista de Letras

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11 Comentarios

  1. Lamentable. En 6 años veremos a los editores pedir subvenciones gubernamentales para paliar los efectos de su falta de visión actual; están causando un daño irreparable al sector.

  2. Si se entiende por libro el conjunto de papeles encuadernados, pues nada pintan allí los «eReaders». Bien diferente si por libro se entiende el contenido. Entonces la situación es diferente y podríamos incluso cuestionar si «las antiguedades» (leáse libros en papel) están permitidas en la feria.
    Muy bueno el punto de Perdomo acerca de las subvenciones.

  3. La edición digital pertenece también al sector editorial, que no se nos olvide. La actitud de la FLM es lamentable, a diferencia de la Feria del Libro de Sevilla, en la que, incluso, se organizan interesantes debates sobre los nuevos soportes, sin prejuicios ni ánimo de destruir.

    Cuando, hace algunos años, se comercializaron los «audiolibros», no hubo ningún problema para aceptarlos. ¿Por qué el libro electrónico ha de ser un problema?

    En lugar de ir de la mano, los editores en papel están dando codazos y arrinconando a los digitales. Unos y otros deberían ser aliados, no enemigos. Sé de buena tinta (electrónica o no), que los editores 100% digitales están más que dispuestos a ayudar y aconsejar a los de papel para afrontar el cambio de modelo e incorporar el eBook en su oferta, basándose en la experiencia y resolviendo problemas que pudieran surgir debido al desconocimiento. Sin embargo, los otros prefieren dar la espalda y lanzarse al ruedo practicamente a ciegas, creando disparatadas plataformas y ofertando libros a precios escandalosos.

    Nadie dice que el libro en papel deba desaparecer, ni el libro electrónico supone ningún peligro para la industria (si el papel desaparece, será porque el mercado así lo decida, no porque la industria acabe con él).

    Y no está de más recordar que, quizás de manera inconsciente, quizás no, se está impidiendo la implicación activa de los lectores (los clientes finales) a quienes, aún hoy día, a estas alturas, no se les tiene en cuenta.

  4. Totalmente de acuerdo con lo que se ha dicho hasta el momento. Coincido en que cualquier tipo de exclusión de este tipo es poco aconsejable a estas alturas de la película. Lo que resulta inquietante cuando se habla de permitir a las digitales entrar en la Feria es: ¿con qué criterios? Es la misma pregunta que me hago cuando paseo por la Feria y tropiezo con una caseta del VIPS o de El Corte inglés (¿hay una?)… que sí, que seguramente tienen todo el derecho del mundo a estar ahí pero siempre me da la impresión de que de alguna manera pervierten el espíritu de la Feria. Y con las editoriales digitales pasa algo parecido: que no todas son editoriales aunque vendan libros. No olvidemos que una cosa es vender libros y otra cosa muy distinta es vender e-Readers (que para eso ya hay otras ferias) o digitalizar a granel con criterios de calidad nulos contenidos en dominio público. ¿Acaso tienen las papeleras caseta en la Feria? Yo no quiero que venga Amazon a enseñarme lo mucho que «mola» el Kindle por muchos libros que de paso se propongan (ya cargaditos en el cacharro mientras no haya demanda de por medio). Quizás para la organización lo más fácil sea vetarlas a todas, a falta de unos criterios específicos referidos a la edición digital… Una normativa que, como sucede en otros muchos aspectos de la edición digital, ya está tardando…

  5. Tanto la noticia como los comentarios se refieren a editores digitales, no a distribuidores de dispositivos. Otra cosa es que esos mismos editores comercialicen eReaders, cosa que, hasta cierto punto, me parece lógico, ya que es el aparato a través del cual se accede a los libros. Y las plataformas que están vendiendo eBooks de varias editoriales también los ofrecen, no es excluyente. Según expones, Gabriela, ¿no estarías de acuerdo en que plataformas creadas por las propias editoriales, como Leqtor, Amabook o Libranda estuvieran representadas en una futura Feria, de ser viable? Ahí sí habría conflicto, porque la web es el canal natural del libro digital. Y son pocas las editoriales «convencionales» que ofrecen sus libros directamente a través de su propia web… Y, si no recuerdo mal, tirando del hilo, recuerdo que el año pasado ya hubo alguna discusión porque en la Feria no se admitieron eBooks, pero sí soportes audiovisuales (DVD’s y CD’s cuyos contenidos literarios no están, ni por asomo, tan relacionados como lo puedan estar los de los libros digitales).

    Como podeis ver, pasa el tiempo y el debate sigue en el mismo punto debido a la cabezonería de algunos que, desgraciadamente, siguen controlando el sector.

  6. Sin ánimo de entrar en discusiones estériles que, como bien dices, siguen siempre en el mismo punto, sólo puntualizar una cosa: si yo no he entendido mal, las tales plataformas son a una editorial digital lo que una distribuidora a una editorial convencional, ¿por qué no irse entonces a Liber? ¿Por qué no crear una nueva feria? Tal y como yo la veo la FLM y todas las ferias del libro en general (como lectora, ojo, no como parte contratante) son una celebración de la cultura, aunque muchos se empeñen en convertirla en un campo de batalla de la cuota de mercado. Sí, peco de candidez, sé que en el fondo la Feria no deja de ser un negocio, pero mucho me temo que sin un cierto grado de candidez (de la que peca cualquier lector cuando firma el contrato de ficción al leer una novela, por ejemplo) seguramente la Feria no tendría el menor interés, por lo menos para mí.

  7. Cualquier movimiento provocaría un terremoto, Gabriela. Algunos de los expositores de la Feria del Libro son distribuidores… A nivel personal, siempre he considerado que se deberían delimitar de manera más clara los enfoques de las Ferias: de libreros, de editores, de distribuidores… Pero, actualmente, está todo mezclado. Y en Barcelona la situación es terrorífica, porque, dejando al margen el Día del Libro, ninguna otra iniciativa o modelo similar al de la Feria parece funcionar. Ni siquiera el LIBER.

    El primer paso a dar para aclarar la situación que se comenta en la noticia, y que compromete a la FLM, la única Feria del gremio, por el momento (que recuerde) que veta a las editoriales digitales, sería que el sector se definiera de una vez por todas: El gremio editorial, ¿considera a los editores digitales parte integrante del mismo? ¿Se debe crear un organismo diferente que englobe a los editores digitales? ¿Cómo quedarían entonces las editoriales que publican en ambos soportes? El sector editorial ¿considera el eBook un producto cultural o tecnológico? (y aquí entraríamos en la polémica del IVA a aplicar). Todas estas preguntas se generan como resultado de la indefinición de los editores, que están mareando la perdiz en lugar de alinearse en un sentido u otro. De esta manera, algo tan provechoso para todos como el avance tecnológico, acaba encontrando muros por todas partes. Así como en otros países el libro digital ya es una realidad, en España, uno de los países de mayor prestigio editorial y que debería haber sido pionero en la edición digital, seguimos a la cola por culpa de decisiones como la de la FLM.

  8. en todo cambio tecnologico subsisten las dos tendencias juntas
    (el pasado ya muerto los miopes los conservadores romanticos que se ahogan en sus propios vomitos, y el presente galopando hacia el futuro de los que ven mas adelante de los visionarios de los inteligente de los que estan vivos)
    ¡ viva el iPad!

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